Por Vanesa Dallazuana

Esta es la historia de Beatriz, mamá de tres chicos que en su juventud tuvo el desafío mayor de su vida, criar un niño por decisión familiar.

Su hermana, con apenas 3 meses de vida le pidió el “favor” de criar a su bebé. “Eran tiempos distintos, cuenta Beatriz”. pero aceptó el reto que la convirtió en mamá de corazón. De un momento a otro debió congeniar la crianza de sus dos hijas con este nuevo integrante de la familia, que apenas entró en su casa se convirtió en un hijo más.

“No fue fácil , cuenta Beatriz , yo tenía a mis dos niñas, una de 4 años y la otra de 1 añito recién cumplidos, sin caminar. No pude decir que no a ese pedido. Cuando nos empezó a decir mamá y papá decidimos que era la hora de ir por la adopción, para no tener problemas legales. Hoy tiene 44 años. Increíble todo lo que vivimos juntos”

Claro que la posibilidad del arrepentimiento por parte de su familia verdadera siempre estaba, cuenta Beatriz. “Por eso también le dijimos a nuestro hijo quien eran sus padres biológicos y por eso también señala quisimos dejar los papeles bien en claro. Hoy lleva nuestro apellido y por supuesto el eterno amor”

Beatriz, revive las historias familiares y saca de esa caja de recuerdos que todos atesoramos en cada hogar, las fotos que traducen ese sentimiento de amor. Sus hijos tomados de la mano, llendo a la escuela con los guardapolvo que ella misma les confeccionaba, o jugando en el caluroso verano en su pelopincho.

Emocionada nos dice “Tengo como para escribir un libro con mi vida”. Pero sin embargo se circunscribe a nuestro pedido periodístico, escribe, con su puño y letra un mensaje para todas aquellas mujeres que intenten o se encuentren con la posibilidad de la maternidad.

“Les digo que se animen a ser madres del corazón porque de ahí no te lo arrancan, se ama y mucho como si fuera propio”

Pd. gracias Beatriz y Lucia por dejarnos abierta su casa y su emotiva historia